Nuestro ADN
¡Bienvenidos a Madre de Dios!
Madre de Dios tiene una extensión de 85000 km² y alberga importantes áreas naturales protegidas como La Reserva Nacional de Tambopata, el Parque Nacional Bahuaja Sonene y el Parque Nacional del Manu, reconocido como Patrimonio Natural de la humanidad por la UNESCO desde 1987, entre otros. Visitar Madre de Dios es recordar que todos venimos de la madre naturaleza; es como volver a casa… ¡Desconectar para reconectar! Explora y sumérgete en las aguas de nuestros ríos y lagos amazónicos. Déjate llevar por la magia de la selva peruana.
Madre de Dios es…
Auténtica
Un territorio que se entrega como es, sin pretensiones, fiel a su esencia: orgánica, natural y pura.
“Somos alegres, reímos… somos solidarios, unidos y así vivimos. No nos olvidamos de nuestra cultura, nuestra lengua…”
“Un lugar donde uno puede ser libre del todo, sentirse libre con aire puro, agua limpia y comida sana. Sentir que con poco es suficiente. Me gustaría que eso se llevara a la gente”.
Cálida
Una región acogedora, que te recibe con los brazos abiertos. Donde convergen muchas sangres y culturas, que conecta territorios más allá de las fronteras y hace que la experiencia sea más accesible de lo imaginado.
«Recuerdo el campamento de Tambopata… caminar por ahí, ver a los animales y escuchar los ruidos: ‘El ruido de la selva’. Un lugar maravilloso con toda la vida silvestre que está al alcance de tus ojos»
Generosa
Un territorio privilegiado a nivel de recursos naturales y productivos. Con importante potencial de desarrollo sostenible.
“Madre Dios es monte, río, árbol, bosque, agua, aire, calor, abundancia y color. Y aunque suene cliché, es biodiversidad por todos lados. Plantas, animales, suelos, ríos, gente, diversidad de absolutamente todo. No existe esa sensación de sentirse ‘menos’ frente a alguien de Lima o algún extranjero”
“Al estar en la Plaza de Armas, uno puede notar la calidad de los bosques alrededor de Puerto Maldonado. Es un tesoro especial”